febrero 2018

La salsa Inglesa, también conocida como salsa Worcestar o salsa Worcestershire es un elemento de cocina muy utilizado a la hora de acompañar comidas o de saborizar platos.

Una de las principales características de esta salsa es que es considerada como un potenciador del sabor para múltiples platos sobre todo las carnes.

No obstante, a lo largo de los años, se han agregado varios usos para este ingrediente. Elaborado en base a salsa de soja, azúcar, vinagre, tomate y una seleccionada variedad de especias, esta salsa es un acompañamiento perfecto para tus comidas.

Hoy te mostramos diferentes formas en las que podes usar la salsa inglesa:

 

Entradas:

El primer plato en una comida es importante para sorprender a invitados pero además para marcar un estándar para el resto del almuerzo/cena. La salsa inglesa puede ser un gran aliado a la hora de preparar entradas como: mouse de atún, verduras al wok o huevos rellenos. También se puede utilizar para saborizar ensaladas o puede ser una práctica opción para usarla como ingrediente o como base a la hora de preparar salsas para acompañar una picada.

 

Plato principal:

Como mencionamos anteriormente, una de las principales cualidades de este producto es la de potenciar el sabor de las carnes.

Se puede utilizar antes de la la preparación, ya que es un excelente ingrediente para marinar carnes o verduras.

Es un muy buen aderezo para preparar tacos o fajitas y es ideal para bañar carnes rojas, pollo y cerdo durante la cocción dándoles un plus extra de sabor a tus recetas.

También puede ser utilizada a la hora de la terminación de un plato o como acompañamiento.

Se puede utilizar tanto en platos fríos como en calientes.

 

Bebidas:

La salsa inglesa no solamente se puede utilizar para preparar comidas. Es uno de los principales elementos a la hora de realizar el famoso cocktail Bloody Mery.

También se puede usar para hacer jugos con frutas ácidas o jugo de tomate.

 

Salsas:

La Salsa Inglesa además es un ingrediente que nos puede ayudar a preparar otras salsas como la tradicional salsa golf, una salsa barbacoa o cualquier otra salsa a la que le quieras dar un toque dulce, especiado y con un poquito de picor.

San Valentín es una fiesta en la cual celebramos el amor que tenemos con aquella persona especial. Son muchas las formas en la cuales podemos festejar este día. Sin embargo, lo más común es salir a comer afuera o preparar una comida Romántica.

En esta oportunidad les traeremos algunas ideas de comida que se suelen disfrutar en esta fecha.

Comer de a dos: Las comidas más románticas son las que se comparten. Ya sea una fondue salada o dulce, tablas de pescado o picada, al comer de a dos la atmósfera se vuelve más divertida y romántica.

Postres: Las comidas que son dulces suelen estar más relacionadas con el “amor” que las comidas saladas, particularmente aquellas que contienen chocolate. Pasando por las frutillas con chocolate, bombones, tortas o hasta brownies, los postres son comidas que te invitan a compartir con tu pareja. Además, nos dan la posibilidad de diseñar una presentación más romántica usando salsas dulces y frutas de colores, desde una frutilla con forma de corazón, hasta una galletita que tenga forma de cupido.

Comida Afrodisíaca: al chocolate se lo relaciona con el amor ya que también es considerado como una comida afrodisíaca. Es por esto que en esta fecha tiene tanta presencia. Pero además del chocolate, podemos encontrar otros productos de estas características como azafrán, canela, pimienta, ostras, menta, palta o frutillas permitiéndonos crear platos de distintos sabores y colores.

Bebida: No todo es comida para celebrar este día, también hay muchas bebidas que se pueden relacionar con San Valentín. Tal es el caso de los vinos blancos, los vinos tintos o el Champagne. También podemos probar tragos de autor con colores rosados o rojos.